domingo, 1 de enero de 2012

Tres Seis Cinco.

Dio tiempo para todo, ¿no? Equivocarme, llorar por amor, sentirme parte del mundo, beber demasiados chupitos de tequila, gastar mucho dinero en maquillaje, enamorarme de verdad, salir de casa sin maquillar, pasar al siglo XXI en la tecnología móvil, hablar con mi madre de amor, seguir teniendo las mejores amigas del mundo, tragarme muchos videos de maquillaje en Youtube, no sentirme segura de mi misma cuando estás a mi lado, ponerme a temblar cuando pasas por mi lado y sertirme la peor persona del mundo. Tener el libro más bonito que se puede leer, sentirme feliz cuando leo a Iker en Facebook, no saber lo que me pasa contigo, suspender cinco en segundo y pasarme el verano madrugando, repetir curso, conocer a gente nueva, escuchar que la SUERTE no es para quien la busca sino para quién la encuentra, y cagarme mil veces en ella. Cuidar de mi corazón más que nunca, echarte de menos, ponerme ¿morena?,más bien rojisisima.Ser odiada por alguien, intentar olvidarte, con la aclaración de que 'la intención es lo que cuenta', volver a beber un poco de CocaCola después de 13 años, tus 127 partidos, crear un blog dedicado a la persona que sigue llenando este minuto de razones para respirar, pasear por Madrid en buena compañía, querer poderte confesar que me tienes loca, arrepentirme de haber querido a gente y de no haber dado mi vida por otros, fumarme un piti con sabor a menta, superar la sensación de tener el corazón aplastado, ser hija de puta en toda regla, pero la vida ha sido más puta conmigo. Sentirme la persona más feliz del universo por haberte tenido a mi lado un tiempo y saber que no valía la pena, porque hoy se que es otro, hoy se que es ÉL, darme cuenta de que cuando se trata de ti la razón no funciona, darte la libertad de hacer conmigo lo que quieras y de quererme a tu manera, disfrutar de un ataque de risa horrible durante una hora cada vez que recuerdo ese: 'mmm si, ¿habeis entendido algo?' de Laura Sastre, pasar unos grandisimos carnavales, confirmar que todo es posible, y que yo también tengo suerte, pero toda mala.
Soñar cuatrocientas veces al año que me susurras al oido un 'Buenos dias princesa', decepcionar a gente, alegrarme de estar a dieta y no tener que comer lentejas o judias, ir al primer concierto de mi vida con Zeta, pasar el más grande de los 1 de Diciembre por saber que significa en nuestras vidas, y, sobretodo, ser consciente de que la vida es bella, y que si no la vivo yo, nadie lo va hacer por mi.
Para el 2012, pido poco. Que las personas importantes, las realmente importantes, sigan ahí, que el destino se porte bien y que podamos ser felices juntos algun día, que a mi mami y al gordi no les falte de nada, y que no me cueste poco ser feliz.

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